En Querétaro, algunas madres de familia han optado por no permitir el uso del celular para niños; si bien reconocen que la tecnología puede ser entretenida y educativa, no es conveniente que los menores usen celulares. El acceso a dispositivos móviles a una edad temprana puede repercutir en su salud, aquí te decimos de qué manera y algunas opiniones de madres queretanas acerca de este tema. Por ejemplo, Patricia Ortiz, una ciudadana, expresa su opinión al respecto:
“Es importante la tecnología sí, pero a una cierta edad. Yo estaría de acuerdo en que cuando entren a secundaria”.
Este criterio es compartido por otros padres, quienes sugieren que el uso del celular para niños no es adecuado; más bien, consideran que este dispositivo debieran usarlo hasta la adolescencia y siempre con supervisión de los adultos. Martina Pérez comenta:
“Yo creo que tendría que ser a partir de que estén probablemente en la secundaria, pero en primaria y eso chiquititos no”.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha emitido un comunicado en el que aborda el tema del uso del celular para niños y adolescentes. En este comunicado, la OMS hace hincapié en la importancia de limitar el tiempo que los niños pasan frente a dispositivos electrónicos.
Según las recomendaciones de la OMS, no se aconseja el uso del celular para niños menores de 2 años; de acuerdo con esta instancia, a esa edad simplemente no deberían tener acceso. Para niños de 2 a 4 años, el tiempo frente a las pantallas debe limitarse a un máximo de 60 minutos al día. En cuanto a los niños de 5 a 17 años, la recomendación es no superar las dos horas diarias, lo que equivale a 120 minutos.
Estas recomendaciones están respaldadas por evidencia científica que sugiere que el uso del celular para niños y adolescentes puede tener efectos negativos en su salud física y mental. Entre estos efectos se incluyen problemas de sueño, sedentarismo, aumento del riesgo de obesidad, dificultades en el aprendizaje y alteraciones en la salud mental.
Es importante que los padres y cuidadores estén al tanto de estas recomendaciones y establezcan límites claros en el tiempo de pantalla de sus hijos. Además, se recomienda fomentar actividades físicas y recreativas fuera de la pantalla, así como promover un estilo de vida equilibrado y saludable para el bienestar integral de los niños y adolescentes.
María Rodríguez, otra ciudadana, añade:
“Ya desde chiquitos aprenden mucho, de por sí ya saben más que uno. Ahí ya salen muchas cosas que tal vez ellos no deberían de ver”.
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