Es común que entre amigos se hagan bromas, pero no siempre es fácil saber si todos se están divirtiendo o si alguien se siente mal.

¿Cuál es el límite de una broma?

Una broma deja de ser inofensiva cuando causa incomodidad, vergüenza o hace que alguien se sienta excluido. Incluso si se dice “era solo una broma”, el daño puede estar hecho.

¿Cuándo una broma se convierte en intimidación?

Si la persona ya pidió que se detenga y el comportamiento continúa, ya no es una broma: puede considerarse acoso. De acuerdo a los datos de la UNICEF, esto puede afectar la autoestima y el bienestar emocional, sobre todo entre niños y adolescentes.

Con información de: Montse Macías.

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